09 mayo, 2010

Facebook como factor de transformación de los mecanismos de participación social y el sentido de pertenencia

 El 30 de abril pasado, un viernes, alrededor de tres mil estudiantes de secundaria faltaron al colegio para reunirse en la plaza principal de Mendoza (Argentina). Respondían a una comnvocatoria publicada en Facebook por dos jóvenes de 17 años. Los bien pensantes se alarmaron de inmediato y comenzaron a reclamar sanciones para este tipo de acciones (a la semana siguiente legisladores mendocinos se apresuraron a presentar un proyecto de Ley para sancionar a los padres de los alumnos que participen de las rateadas). Los pilares de la educación (disciplinaria y vertical) se tambalean.
Este tipo de evento refleja la nueva realidad social y política que se está gestando en los usos y prácticas de la Web. Los medios sociales en la web (entre los cuale está Facebook), permiten establecer lazos de pertenencia entre personas que no se conocen previamente pero que puntualmente pueden compartir deseos, ideas o proyectos. Se trata de unos potenciales de Internet que más se destacaban en los primeros años de las expansión de la Web. Los jóvenes, poco a poco, sin necesidad de padrinos ideológicos ni tecnogurúes, comienzan a comprender las posibilidades sociales de la Red que los mass media prefieren ignorar o minusvalorizar. Así, en su edición impresa de hoy, el diario La Nación publica un breve en el que escribe:
"MAR DEL PLATA .- La nueva moda entre los adolescentes llegó a la costa argentina y tiene fecha para el 21 y el 26 de mayo. El sitio de Facebook que organiza la 'la gran raateada marplatense' ya suma más de 10.000 seguidores, y el objetivo del faltazo masivo será que cada estudiante lleve un alimento no perecedero para donar a comedores infantiles. Además, reclamarán la instauración del boleto estudiantil gratuito para primaria y secundaria" (las negritas son mías - En el lúgubre período de la última dictadura en la Argentina diez adolescentes de La Plata fueron secuestrados y seis de ellos asesinados por el gobierno militar por reclamar el boleto estudiantil, episodio criminal conocido como "La noche de los lápices" )


Esta convocatoria revela el alcance que puede llegar a tener la utilización de los medios sociales en la Web como medio de movilización social y política. Hace más de diez años, escribí como conclusión de "La pantalla ubicua" (La Crujía, 1999) que "el funcionamiento descentralizado y no comercial de Internet durante años muestra que existen alternativas al actual modelo sociocomunicativo" Tendencia que la actual explosión de los medios sociales en la red parecen confirmar. No es difícil prever acciones de empresas y gobiernos (económicas, técnicas y periodísticas) para restringir el desarrollo de las redes sociales. La decisión de "NING" (una popular herramienta para crear redes sociales muy utilizada en la educación) de interrumpir la gratuidad del servicio a partir del próximo 4 de julio puede ser vista como una avanzada de la nueva estrategia en este área.
La libertad da miedo. 

2 comentarios:

Utopía dijo...

Si, no solo la libertad da miedo tambien la ignorancia. Recientemente un grupo de ex alumnas de una escuela de arte formaron un grupo en faceboock. La manera de relacionarse, de escribir y de publicar fotografías (para mi entender muy creativas,pero tambien irónicas) despertó el espanto de los directivos y un grupo de profesores que se sintieron ofendidos por el tono en que se manifestaban.(No nos olvidemos que estoy hablando de una escuela de arte, en donde se habla de creatividad, análisis critico, memoria, identidad, etc.) Lo mas insólito de la situación fué escuchar a la directora y a dichos profesores decir que se habían sumado al grupo para saber que decían éstas ex alumnas. La fuerza controladora de la escuela, y de la autoridad sigue fuertemente vigente tras un manto aparente de libertad. Es verdad la libertad da miedo, todavía da mucho miedo.

Diego LEVIS dijo...

Muy interesane y revelador lo que contas. Vivimos en una sociedad a la que le cuesta desprenderse de la tradición de represión que nos legaron sucesivos gobiernos militares y que la escuela, tantas veces, reproduce sin reflexionar acerca de las consecuencias: una sociedad con dificultades para convivir con la diversidad de ideas. Afortunadamente, pienso hay algunos signos que muestran que empezamos a cambiar (pienso en la aceptación del casamiento entre personas del mismo sexo)