18 abril, 2009

Marchando otra de censura: De cuando la "libertad de empresa" se enfrenta a la libertad de expresión y de creación

Leido en un blog de La Nación:

(...) La Plataforma de Blogs de Microsoft: Windows Live Spaces, tiene un Código de Conducta, que viola los Principios fundamentales de la Declaración de los Derechos humanos. Se han censurado y cerrado blogs por publicar obras de arte universalmente reconocidas como: La carta, de Botero,El Nacimiento de Venus, La maja desnuda, El David de Miguel Angel.. El último atropello a la dignidad humana, fué el cierre del blog de Basileia, por imágenes de campañas de UNICEF, Amnisty Internacional, SOS Aldeas Infantiles, etc contra el maltrato infantil y la violencia de género, que Microsoft las tildó de "inapropiadas" para ser observadas. Era un espacio destinado a ayudar a las víctimas de esos abusos y maltratos. Hemos reclamado la reapertura del blog, y no se dignan siquiera contestarnos. Basileia posee otro blog en Blogger, con el mismo contenido censurado por Spaces. La dirección es para que lo visiten y comprueben la fabulosa labor de Basileia: http://rincondebasileia.blogspot.com/ Quién enjuicia a Microsoft por violar el art 19 y 27 de los Derechos Humanos, promulgados por la ONU? Pues los violan y no les importa nada.
Más información sobre este nuevo caso de censura

4 comentarios:

Anónimo dijo...

...personalmente ingresé al blog que fue objeto de ¿censura? y las imágenes y los contenidos no me agradaron especialmente de modo que éste puede ser un motivo suficiente para que no vuelva a ingresar...pero esta apreciación individual de ningún modo justifica su cierre.

Paralelamente, si uno presenta un escrito a una editorial a fin de que el material sea valorado para una posible publicación, y la empresa decide que no le interesa por el motivo que sea...¿Es este acto en sí mismo una "censura"?

Ahora bien, WSL tiene un Código de Conducta que se les presenta a los potenciales usuarios antes de que puedan comenzar a ser parte de él, y si bien no lo he leído por algunos comentarios, el mismo reviste cierto tinte autoritario.

En ese caso y siguiendo con esa misma línea ...¿No tiene un componente de hipocresía que si una persona no acuerda con el Código de Conducta, aún así se vuelva su usuario?

Gracias,

Anónimo dijo...

La calidad o baja calidad del material censurado no justifica la censura. Todos los días observamos productos culturales pésimos desde todos los puntos de vista y allí están. La comparación con la industria editorial parece pertinente, sin embargo existe una diferencia, la editorial cuando decide no publicar algo lo hace manejándose básicamente por criterios comerciales. En otros caso lo hace siguiendo criterios ideológicos, posiblemente en ambos casos sean formas de censura, en tanto coartan la libertad de expresión. Las aplicaciones en la red son presentadas como espacios de "libertad". Todos sabemos que eso es una ilusión. La libertad de empresa casi por definición se opone a la libertad de expresión. la web se presenta como un espacio de publicación libre. Mientras no se violen las leyes así debería ser. En la práctica no siempre lo es

Anónimo dijo...

En relación con tu último aporte Diego acerca de que la web se presenta como un espacio de publicación libre, puede ser oportuno hacer referencia a un comentario de Paula Sibilia escrito hace un tiempo en un medio gráfico:

"La web original, que era la famosa web.com, explotó; en ella las puntocom eran las grandes empresas que producían el contenido y los usuarios eran simplemente consumidores, espectadores, lectores. Entonces, en la web 2 los usuarios colaboran con las empresas. Se hacen amigos, a cambio de recibir publicidad"

Este nuevo escenario que parece insinuarse ¿Implica mayor democratización? ¿Libertad de expresión? o ¿Por el contrario un retroceso en el que esos mismos espacios fingen ser lo que rara vez son, los actores se entremezclan y sus bordes y fronteras se vuelven difusos erigiéndose de este modo en nuevos - aunque podrían denominarse blandos - mecanismos de control?

Diego LEVIS dijo...

Las editoriales también hacen dinero con lo otros escriben, salvo excepciones son empresas mercantiles.
Si bien siempre ha sido posible publicar de forma independiente (el autor financiando la edición de su obra)el costo y las dificultades de distribución hacían que fuera una práctica poco extendida
En la web es posible publicar libremente sin intermediarios a un costo muy bajo. Basta tener nociones mínimas de html, registrar un dominio y disponer de un espacio en un servidor. Hace varios años que tengo mi sitio web en donde publico lo que quiero. Algunos de mis textos en la web han sido visitados (no puedo saber si leídos) por decenas de miles de lectores potenciales, sin que generar una operación mercantil de ningún tipo.
La web tiene un alcance mucho mayor que el de las aplicaciones "mediatizadas" . La web a finales de la década de 1990 era mucho más que las punto com y la burbuja financiero
Se trata de un tema complejo lleno de matices