29 diciembre, 2011

Derechos de autor, cultura libre y beneficios empresariales

Cultura libre (y gratuita), creación artística, industrias culturales e Internet. Tema complejo, discusión sin acuerdo posible.
Los músicos, cineastas, escritores y demás creadores deben poder vivir de sus obras. Las empresas, en una sociedad capitalista, defienden  sus inversiones. Los espectadores, oyentes y lectores aspiran a acceder libremente a las creaciones artísticas. ¿Cuál es el punto de encuentro?
Jorge Coscia publicó hoy un artículo en Página 12 en el que dice, refiriéndose a este dilema, que "La libre difusión de música, películas, textos de ficción por Internet ha desatado una dura polémica en todo el mundo. Se divulgan obras protegidas sin pagar un solo peso de derecho de autor. Los internautas claman por la “cultura libre”. Nadie, con cierto grado de sensibilidad, puede estar en contra.  Pero ocurre que detrás del romántico ciberespacio circulan miles de millones de dólares que van a parar a los bolsillos de empresarios, gerentes, programadores y técnicos que jamás generaron un hecho creativo. ¿Por qué los autores tenemos que ser los únicos socialistas de esta historia?"
La radio desde hace más de 80 años difunden gratuitamente valiosos contenidos culturales. La diferencia es que hoy la difusión no está dirigida de acuerdo a los intereses políticos y/o económicos de las emisoras. Todos somos virtualmente emisores de contenidos. Esto plantea la necesidad de replantear el modelo de comercialización de bienes culturales desarrollado desde el desarrollo de la industria cultural que siguió a la expansión de la imprenta de tipos móviles.
De algo estoy seguro. Las empresas editoriales, salvo honrosas excepciones, no defienden los intereses de los autores, incluso en demasiadas oportunidades abusan de la confianza de estos, escatimando el pago de los derechos de autor acordados por contrato, falseando las cifras de venta, ocultando ediciones y otras prácticas poco dignas. Conozco muchos casos y padecí algunos.  

Artículos de interés
"La revolución cultural del procomún" Por ANTONIO FRAGUAS en El País 28/12/2011 Libros, discos y festivales dan cuerpo a una teoría que cuestiona la propiedad intelectual y considera las obras de creación bienes pertenecientes a la comunidad
"La ministra se va 'de gira' tras el fiasco de la 'ley Sinde'" por RAMÓN MUÑOZ en El País, 5/12/2011

Entradas anteriores en Tecnoculturas
La cultura en la sociedad ciberista: industrias culturales vs. cultura compartida publicado el 4/9/2011
¡Piratas son los que asaltan, roban y matan en mares y rutas! En Brasil se debate una nueva ley de derechos de autor 10/01/2010

27 diciembre, 2011

Desanudando y anudando redes y personas.

Cuando Tim Berners Lee creó el HTML a finales de la década de 1980 imaginó un sistema de edición hipertextual que permitiera editar y compartir de modo sencillo informaciones en distintos formatos. Con este espíritu, a comienzos de la década de 1990 nació la World Wide Web. Mucho antes de que a un inquieto agente de marketing se le ocurriera bautizar como web 2.0 los usos sociales de la red, la web ya era un espacio de publicación comunitaria en el cual se desarrollaron distintas experiencias de colaboración en línea (comunidades virtuales, aplicaciones P2P para compartir archivos de texto, imágenes y sonido, juegos en línea), a lo que se debe añadir el uso de otras aplicaciones como listas de correo, foros, tableros de anuncios e incluso salas de chat - consultar en CiberMemoria 
En estos días, algunos artículos periodísticos recuerdan que la vida en la web no comenzó con Facebook y Twiter. Entre ellos, es relevante el  papel que jugó Indymedia - un sitio de periodismo realmente independiente - en las  protestas en contra de la Organización Mundial de Comercio de finales de siglo que dieron lugar a la convocatoria del Foro Social Mundial y el rol que este mismo sitio tuvo durante la crisis de 2001 y 2002 en la Argentina.Tiempos aquellos en los que era posible navegar en la web sin dejar una estela indeleble de nuestro recorrido, en donde nuestras acciones y dichos aún no eran utilizadas para completar bases de datos susceptibles de controles y registros de todo tipo y finalidad.  

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Todo lo que Google y Facebook cuentan de ti  Por Jane Wakefield en La Nación, 21/12/2011
Antes de la web 2.0  por Mariano Blejman en Página 12, 27/12/2011
Lo que importa es la cantidad, no la calidad  Por Ariel Torres en La Nación 17/12/2011